Caldera de Aceite Térmico Eléctrica

Las calderas de aceite térmico eléctricas son sistemas que se prefieren generalmente en aplicaciones industriales y proporcionan la energía térmica necesaria utilizando energía eléctrica. Como usted menciona, estas calderas funcionan a alta temperatura y baja presión con la energía que obtienen de la electricidad.

Estas calderas se utilizan generalmente en diversas áreas industriales como las industrias textil, procesamiento de alimentos, química y petroquímica. Sirven como una fuente efectiva de calor en procesos que requieren altas temperaturas.

Caldera de Aceite Térmico Eléctrica
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Serie Electro
Serie Electro - Caldera de Aceite Térmico Eléctrica
  • Capacidad Térmica : 100.000 Kcal/h - 5.000.000 Kcal/h
  • Temperatura de Operación : 60°C - 320°C
  • Tipo de Diseño : Tipo cilíndrico vertical-horizontal con serpentín, tubos de acero sin costura P235 GH según la norma TS EN 10217-2
  • Sistema de Combustión : Eléctrico - 230V 50 Hz * 230V 60 Hz / Eléctrico - 380V 50 Hz * 380V 60 Hz
  • Panel de Control : Control táctil PLC
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Caldera de Aceite Térmico Eléctrica

El aceite de transferencia térmica utilizado en las calderas de aceite térmico eléctricas ofrece algunas ventajas en comparación con el agua. Es más resistente a la petrificación, la formación de cal, la sedimentación y los efectos corrosivos. Esto permite un menor mantenimiento del sistema y la posibilidad de un uso prolongado.

La eficiencia energética de las calderas de aceite térmico eléctricas puede variar dependiendo de la fuente de electricidad utilizada y del diseño. Sin embargo, como no hay un proceso de combustión directa, este tipo de calderas generalmente se consideran más respetuosas con el medio ambiente.

Los costos de inversión inicial y de operación de las calderas de aceite térmico eléctricas pueden variar dependiendo de las tarifas eléctricas utilizadas y de los requisitos de mantenimiento. Sin embargo, su estructura que requiere menos mantenimiento puede proporcionar ventajas de costo a largo plazo.

Estas calderas eléctricas pueden alcanzar altas temperaturas mientras reducen los riesgos de seguridad gracias a su característica de funcionamiento a baja presión. La baja presión también asegura una vida útil más larga del sistema.

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